Antes de irse de la Presidencia, Juan Manuel Santos, firmó dos decretos para implantar la denominada ‘ideología de género’ en Colombia, pues aunque el ex presidente quiso a toda costa imponer esta perversidad, dos de sus intentos para hacerlo, como lo fueron las ‘Cartillas de Gina Parodi’ y el acuerdo de paz de La Habana con las FARC, no le resultaron como él hubiera querido.
Por eso, y aunque desconoció el resultado del Plebiscito de 2016 y matizó el tema de las cartillas de Parodi, no podía perder su último aliento de poder, y para implantar dicha ideología de manera arbitraria y transversal, Santos en compañía del lobby LGTB expidió en marzo y mayo respectivamente, los decretos 410 y 762 de 2018.
El decreto 410 del 1 de marzo de 2018 especificó la supuesta necesidad de ‘Transformación Cultural’ y el decreto 762 del 7 de mayo de 2018 está encaminado a la ‘Promoción y Garantía’. Estos dos decretos se fundamentan en la palabra promover. La pregunta que surge es: ¿promover qué? Y la respuesta es muy sencilla: El Enfoque de Género y el Enfoque Diferencial. En otras palabras, la ‘Ideología de género’.
Esto significa que todo el aparato del Estado y el dinero de los impuestos debe enfocarse a este tema. Además, estos dos decretos, darán paso a una transformación cultural que será impositiva y contará con medidas coercitivas por parte del Estado para perseguir y señalar a todo aquel que no esté de acuerdo con lo que disponen los ya mencionados decretos.
(ver nota) http://movimientosolidaridad.blogspot.com/2018/08/los-decretos-del-saliente-gobierno.html
Pero para entender con más detenimiento este flagelo, hay que explicar de manera sencilla lo que es la ‘Ideología de género’, cuya definición se ha ilustrado de forma magistral en El libro negro de la nueva izquierda, así: «Es un conjunto de ideas anticientíficas que con propósitos políticos autoritarios, desarraigan la sexualidad de su naturaleza humana y la explican monopólicamente por la cultura. Es decir, que si un hombre se percibe como mujer, esa percepción subjetiva lo convierte en mujer, obligando a todos los ciudadanos a través de la fuerza pública del Estado a ser participes de dicha fantasía y a ser financiadores de la misma a través de los impuestos. La ‘Ideología de género’ es anticientífica porque a través de las ciencias exactas (anatomía, fisiología, biología, medicina, neurociencias etc.) no se puede explicar ni comprobar lo que plantea. La ‘Ideología de género’, no es concebible sin el estatismo, no se propone sino que se impone».
Ahora bien, si estos decretos permanecen por mucho tiempo y el actual gobierno no hace nada para derogarlos, como consecuencia, se destruirá el modelo de sociedad que conocemos desde hace dos milenios. Ahora bien, ¿qué pasaría si estos decretos siguen su marcha? Simple: el Estado producirá desarrollos institucionales LGTB, lo que en otras palabras significa que con los impuestos de los contribuyentes, puede crear ministerios, secretarias e institutos dedicados a promocionar la ‘ideología de género’, y esto se hará a todo nivel: cultural, sanitario, educativo, laboral o judicial entre otros. Además se sufragará el cambio de sexo de los miembros de estos colectivos y también se les asignarán cuotas laborales obligatorias en empresas públicas y privadas.
Esta política también dará paso a cosas como la perdida de la patria potestad de los padres sobre sus hijos, los niños se verán inmersos en ‘cátedras’ obligatorias que tergiversarán la sexualidad, habrá persecución a la libertad de pensamiento y opinión, y la familia será la institución más perjudicada. Todo esto tendrá como principal herramienta, un programa de educación nacional que de manera estructural promoverá un cambio cultural en las diferentes instituciones del país”.
En medio de este contexto, la sociedad civil colombiana organizó un colectivo denominado #NiCartillasNiDecretos el cual se levantará y saldrá a las calles a marchar. Asociaciones de padres de familia, académicos, científicos, religiosos, profesionales, organizaciones católicas y personas del común a nivel nacional, marcharán el próximo seis de noviembre, en las diferentes ciudades y poblaciones del país. El objetivo de la marcha es defender a los niños y que el actual gobierno conozca esta situación para que derogue los decretos 410 y 762 de 2018, los cuales como se explicó a lo largo de este artículo, tienen como objetivo la implantación de la ‘Ideología de género’ en Colombia.