Por: Jennifer Gallón Martínez @JenniferGallonM
Las nuevas generaciones no estamos para quejarnos por el pasado ni por el presente, estamos para corregir el rumbo y promover que las cosas se hagan mejor.
Durante décadas, por culpa del nefasto negocio del narcotráfico y del terrorismo disfrazado de diferentes matices ideológicos y sofismas discursivos, muchos compatriotas tuvieron que migrar a diferentes lugares del mundo para poder tener una perspectiva de vida diferente, enfrentándose al peor de todos los obstáculos: la discriminación y la xenofobia.
Pero también durante más de veinte años , no solamente desde el Gobierno Nacional sino desde diferentes agremiaciones y organizaciones sin ánimo de lucro, se luchó mediante campañas publicitarias en el exterior para quitar el estigma del narcotráfico, la trata de personas y la ilegalidad del imaginario sobre los colombianos, además, fomentando el turismo a diferentes destinos nacionales, no solamente vendiendo la indescriptible belleza y riqueza tanto natural como cultural de todos los rincones de nuestro territorio, sino vislumbrar la seguridad para la integridad de los turistas y viajeros, como el programa ¡Vive Colombia: Viaja por ella! realizada durante el gobierno de Andrés Pastrana Arango (1998-2002), quien tuvo que afrontar desde escaladas de violencia entre diferentes grupos de la criminalidad operando en el país frente a un Plan Colombia (cooperación de Estados Unidos para el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas y modernización del Estado) hasta un fallido proceso de paz con las FARC sumado a la desconfianza de mercados y las relaciones diplomáticas por haber tenido la peor crisis financiera hasta el momento en la historia del país (1999-2001) precedida por dos quiebras bancarias y el coletazo de la crisis de las cooperativas (1995-1996).
Esto se lograría consolidar durante las políticas de Seguridad Democrática y Confianza Inversionista en los gobierno de Álvaro Uribe Vélez (2002-2010), donde con iniciativas publicitarias y artísticas como ¡Colombia es Pasión!: el riesgo es que te quieras quedar. La reestructuración del Estado a unas entidades más austeras, conectadas y con enfoque conjunto, ha sido un factor del éxito, y eso puede evidenciarse en primer lugar con la creación del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo fusionando otras carteras y la evolución de Procolombia, la creación de entidades financieras y programas de promoción del turismo e inversión en el país que a nivel local, han sido replicados por las principales ciudades capitales, así como agrupaciones de municipios y departamentos.
Pero algo que hay que destacar, es que no solamente las entidades públicas financieras y económicas, sino también las ambientales permitieron esta sinergia. En esto cabe recordar la Unidad Administrativa de Parques Nacionales, bajo la dirección de la doctora Julia Miranda, quien hizo la sinergia con la empresa AVIATUR -la mayor agencia de viajes del país- para la coadministración del turismo de todos los tipos y estratos en algunos de los sesenta parques nacionales, cuya dinámica de ecosistemas y conexión social lo permitían, generando una nueva dinámica de turismo que permitió visibilizar nuevos destinos de la Colombia profunda a nivel mundial.
Retrocediendo un poco en la historia, para volver al tema de los aportes de la diáspora colombiana en el exterior, se hizo justicia con estos compatriotas en la Constitución de 1991 al incluir en la Cámara de Representantes dos curules para los colombianos en el exterior, para que sus voces, experiencia y ejemplo de tenacidad sean escuchados en el país; pero también para que sus derechos fundamentales sean defendidos por el Estado, aunque ya no vivan en el país.
La migración, no solamente ha sido por fenómenos adversos, como la violencia o la pobreza, sino para encontrar en otras latitudes cadenas de valor desde lo académico o empresarial para el desarrollo de talentos artísticos, científicos y deportivos. Esos pioneros representantes de la alegría, tenacidad y valor de las mujeres y hombres colombianos, han abierto un camino en nuestro país, actualmente ha logrado la llegada de conciertos, festivales, instituciones artísticas, agremiaciones, empresas, sellos musicales, galerías de arte, parques de diversiones, aerolíneas, cadenas hoteleras, colegios, obras sociales…en fin…Shakira, Carlos Vives, Juanes, Fonseca,Jorge Celedon, Andres Cepeda, Chocquibtown, Herencia de Timbiquí, Sebastian Yatra junto a un sinnúmero de orquestas, cantantes, folcloristas, conjuntos y grupos de danza que en diferentes escenarios tanto comerciales como independientes no solamente han consolidado una carrera personal, sino que han puesto al país como un destino artístico, de inversión y con un verdadero potencial de emprendimiento a nivel de América Latina en las industrias creativas y culturales.
La buena imagen de nuestro país viene de nosotros mismos, de nuestros comportamientos, de lo que compartimos en redes sociales y de lo que defendemos como identidad nacional. Se han endurecido las leyes migratorias no solamente en Europa y Norteamérica, sino en países hermanos como México, y esperamos que esta situación cambie. Pero, solamente depende de nosotros como ciudadanos al exigir que se promueva lo positivo de nuestro país por parte del Estado, de nuestras cultura y nuestra sociedad que tiene cosas maravillosas únicas e irrepetibles para aportarle al mundo.