En las últimas horas un nuevo ataque criminal del ELN ha dejado el lamentable saldo un uniformado asesinado y otro herido en la vereda Cerró Bravo, en la vía que conecta a los municipios de Ocaña y Aguachica, en el departamento de Norte de Santander.
En las últimas horas un nuevo ataque criminal del ELN ha dejado el lamentable saldo un uniformado asesinado y otro herido en la vereda Cerró Bravo, en la vía que conecta a los municipios de Ocaña y Aguachica, en el departamento de Norte de Santander.
El ataque, que tuvo lugar en la mañana del lunes, afectó a dos militares del Batallón Ricaurte, quienes, según las primeras investigaciones, fueron emboscados por un francotirador. El soldado profesional Ramón David Pacheco Regino perdió la vida en el acto, mientras que su compañero, Jhaesi José Teherán Arrollo, resultó gravemente herido con una herida en la espalda a la altura del hombro. Teherán fue trasladado de inmediato a un centro médico para recibir atención especializada.
Este ataque criminal se suma a una serie de ataques perpetrados por otros grupos criminales de la la región y se da en medio de una supuesta “reanudación” de diálogos entre esta organización criminal y el gobierno Petro.
Se presume que, con esta cantidad de explosivos, este grupo criminal habría logrado una afectación letal en 70 metros a la redonda del lugar de la explosión, con posibilidad de causar heridas y daños por esquirlas hasta los 150 metros.
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