Con motivo de la designación de Alejandro Gaviria como ministro de educación, cabe recordar las decisiones tomadas durante su periodo ministerial durante el mandato de Juan Manuel Santos que permitieron un desbordado crecimiento de cultivos ilícitos en el país.
La decisión de la suspensión de la aspersión aérea en el país se dio en el año 2015, un año antes del denominado “Plebiscito por la paz”, y en el momento que el país registraba un crecimiento exponencial en la producción de coca. Textualmente para ese año, el exministro de salud señalaba puntualmente que:
“Probablemente cancerígeno para los humanos” siendo este uno de los motivos para terminar con el mismo.
No obstante, y tras haberse registrado un notable descenso de cultivos ilícitos en el país desde el 2007 hasta el 2012, a partir de este año empieza el decaimiento de las acciones contundentes contra el narcotráfico en Colombia.
Para el 2015 en adelante el crecimiento de coca llegó a registrar las cerca de 250.000 hectáreas cultivadas. De acuerdo al sistema de monitoreo de Cultivos ilícitos (Simci) para el 2019 se registraron 1.228 toneladas de coca, una de las producciones más altas registradas en los últimos años. Lea elnodo.co
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