Del 5 al 7 de octubre se celebró en Perú la 52° Asamblea de la OEA con una multitud de personas que salieron a protestar por la injerencia ideológica de este organismo en los países de la región.
Del 5 al 7 de octubre se celebró en Perú la 52° Asamblea de la OEA con una multitud de personas que salieron a protestar por la injerencia ideológica de este organismo en los países de la región.
Varios fueron los parlamentarios peruanos y gente del común quienes, con multitudinarias marchas salieron a levantar su voz de protesta contra estos organismos.
Adicionalmente la plataforma Citizen afirmó en un comunicado que: “En la conferencia de prensa, el abogado argentino Sebastian Schuff, presidente del Global Center for Human Rights, reveló varios casos de financiamiento condicionado en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Interamericana. El informe-denuncia señala países, empresas y ONGs financiadoras que condicionan las instituciones americanas a una agenda abortista y LGTB”.
Alertando los condicionamientos y financiaciones de organismos multilaterales, empresas multinacionales y ONG’s de izquierda que buscan financiar este tipo de actos.
Adicionalmente, se llevaron a cabo marchas próvida para protestar contra las organizaciones feministas.
Lo más indignante es la postura sumisa de un gobierno que, en lugar de proteger a sus ciudadanos y respaldar a la fuerza pública, sigue otorgando credibilidad a quienes solo han demostrado ser expertos en traición y muerte.
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